El intendente de Famaillá fue inhabilitado de por vida para ejercer cargos públicos y deberá pasar tres años en la cárcel.
La Justicia nacional condenó a José Orellana a tres años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos por el delito de abuso sexual simple cometido en 2016, mientras se desempeñaba como diputado nacional por Tucumán.
El relato de la víctima -secretaria de una legisladora entonces- explicó que al ingresar al despachó de Orellana, este se le acercó y, tras un abrazo, comenzó a besarla en el interior de la oreja. El fiscal nacional Sandro Abraldes expresó en su alegato que “Orellana se valió de la posición de superioridad jerárquica, de la investidura de Diputado Nacional para intimidar a la víctima y de ese modo concretar el acto sexual”.
A modo de prueba se exhibieron filmaciones que constataron la entrada y salida a la oficina del ex diputado, sumado a un examen psicológico con una profesional y un informe de la Dirección de Orientación, Acompañamiento y Protección a las Víctimas (DOVID). Así, el estado psicofísico de la víctima fue determinante para la condena final.
El fallo fue dado a conocer el día de ayer en una sentencia que llevará a Orellana a la cárcel por tres años, además de la prohibición de acercarse a la víctima durante cuatro años.
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